Acabar con los "Negociazos"
El Perú necesita una discusión abierta y honesta de carácter terapéutico sobre la corrupción y la transparencia.
Publicado en Exitosa - 15 Octubre 2016
La violenta expulsión y caída del Dr. Moreno Chacón de los círculos más altos y exclusivos del poder ejecutivo, ha puesto en evidencia la cruda realidad de lo que significan el manejo y la gestión de los asuntos nacionales en nuestro país: para los pocos elegidos y allegados al círculo de poder, la manera más segura y rápida posible de enriquecerse, sin incurrir en riesgo comercial alguno, y gracias al usufructo abusivo del erario nacional.
No obstante el primer ministro y la clase política en su conjunto hayan condenado de manera categórica y enérgica las intenciones venales del ahora ex asesor presidencial, en estos momentos, prevalece entre la población un generalizado sentimiento de indefensión y, lo que es peor, triste resignación ante la convicción de que la corrupción y el abuso de poder es la dupla abyecta que permea nuestra administración pública.
Prácticamente, sobre cada uno de los proyectos de inversión pende, como espada de Damocles, la sospecha inminente de corrupción: en los costos de la línea 2 del metro, en los gastos y organización del ministerio del interior, en las filas del ministerio de salud, en las inversiones de los gobiernos regionales, para no mencionar, las negociaciones y adjudicación de contratos con las empresas extranjeras que invierten en nuestro país.
Esta alarmante situación requiere en primer lugar que aceptemos la realidad y existencia del mal que nos aqueja. No basta un presidente y un gabinete “de lujo”, que se desentiendan desdeñosamente de los reclamos de transparencia. El Perú necesita una discusión abierta y honesta, me atrevería a decir, de carácter terapéutico sobre la corrupción y la transparencia.
¿Cómo podemos recuperar la confianza en nuestra clase política? ¿Cómo volver a confiar en la probidad de nuestros servidores públicos? Qué mecanismos de control debemos implementar para, sin entorpecer, salvaguardar el correcto y buen funcionamiento del estado.
Iniciar y liderar este urgente debate a nivel nacional le compete al Sr. Pedro Pablo Kuczynski, en tanto es, tal vez, la única persona y político que en estos momentos aún goza de legitimidad y confianza en nuestro país.
Soslayar esta tarea ardua y de largo aliento es condenarnos a revivir una y otra vez la resaca de los “negociazos”.
Ginebra, 15 de Octubre de 2016